
Después de adoptar a otro pequeño psicopompo (preñado, de columna desviada y con un ojo que ya recuperó) paré.
Me sugestiona cómo reacciona mi cuerpo, ignoro si sea bueno o malo. En pos de presión física y mental, rápidamente enfermé. No acudo a los médicos porque además de ser imbéciles, me desagrada bastante ingerir mierda y aunque me distraje con la época y sus “brindis de fin de año” cumpliendo casi con todo; al final adqurí la maldita influenza.
No me hago a la idea de los fluidos con sangrado... las ensoñaciones diurnas, noches febriles y mi boca y nariz reventadas.
Y en un lapso turbado por temperatura mientras “dormía”, reconocí una canción que muchos años antes me daba miedo y veía cómo la Bruja mala del Este/Oeste se iba por el excusado.
De niña sentía miedo cuando veía El Mago de Oz, más los simios alados en blanco y negro pero a las brujas nunca les presté atención.
No sé porqué emergió esa imagen, tuve que “asistirme” repetidamente con la grandiosa voz de Klaus Sperber (hoy tan de moda entre jovenzuelos) y la mágica canción:
Ding Dong! The witch is dead.
-Which old witch?
The wicked witch!
Ding Dong! The Wicked Witch is dead.
Wake up - sleepy head, rub your eyes, get out of bed.
Ding Dong! , the Wicked Witch is dead.
She's gone where the goblins go,
Below - below - below!!
Yo-ho, so let's open up and sing... and ring the bells out!!!!!!!
Ding Dong' the merry-oh, sing it high! sing it low!
Let them know:
The Wicked Witch is dead!!!!!!!!!!!
Etiquetas: Artificios
0 Comments:
Publicar un comentario
<< Home